Análisis del Marco curricular y Plan de Estudios 2022. EBM (2a. Parte)

 El currículo y el docente en la actualidad

De acuerdo con el Marco Curricular, la obligatoriedad de la educación básica es el resultado de un sistema político y económico que piensa en las diferencias sociales que existen. Pero al no articular lo común con lo diverso, enfatiza desigualdades y exclusiones por el género, condición física, grupo étnico y sexual, pues todo está centrado en el nacionalismo, mestizaje, positivismo y patriarcado y que son una de las causas del abandono escolar, la repetición, el bajo rendimiento académico que resultan de la aplicación de pruebas estandarizadas.

La pretención de la modernización educativa y por ende, de la sociedad mexicana ha sido a través de la idea del aumento de niveles educativos de la población y el establecimiento de valores laicos en aras del nacionalismo y de la familia; todo esto con la intención de cambiar la mentalidad de los habitantes desde la escuela misma. Si a esto se le añade el aspecto antropológico en donde, partiendo el mestizaje, se promovió la política indigenista de unidad racial, buscando una nueva sociedad integrada por ciudadanos mentalmente sanos y miembros de una familia (Horcasitas, 2007), entendemos mejor la razón de los programas actuales.

El currículo educativo actual reproduce la síntesis cultural, social y étnica mexicana y lo inserta en el proceso de globalización económica, con aprendizajes nuevos que permitan ejercer dentro de la sociedad global de la información. Su estructura es de contenidos básicos en forma de competencias o aprendizajes clave regidos por un conjunto de saberes, habilidades y conocimientos que logren la adquisición de comprensión lectora, pensamiento lógico matemático y habilidades científicas. Sin embargo la jerarquización de contenidos no es en cuanto a los intereses de los estudiantes, se fragmenta por tanto, el conocimiento; los libros de texto son para uso y comprensión del maestro de grupo; no se toma en cuenta el contexto escolar y se ignora la diversidad en todas sus formas.

La estructura ha sido similar, cambiando nombres únicamente, pero obedeciendo a proyectos políticos. Debe establecerse entonces la legitimación del saber escolar, la actividad del docente y el papel de la escuela hacia la sociedad para darle viabilidad al currículo. Hecho todo también de acuerdo con las ideas de quienes ostentan la autoridad y el poder.

El currículo menciona un sustento en el enfoque constructivista, sin embargo, sigue estando mediante la estrcutura de la tecnología eductiva en donde, si bien el estudiante es el centro del proceso, también es cierto que debe conducírsele al logro de objetivos. Es cierto, debe desarrollar competencias, pero debe expresarlas a través de conductas y, en el caso de los maestros, esto debe enseñarse con actividades adecuadas que les permita cumplir con lo indicado en cada Programa de Estudios.La escuela forma alumnos que saben leer, que dominan operaciones básicas, que pueden expresarse en público o tener habilidades administrativas y contables por tanto. Hacemos uso de un currículo con base a asignaturas lo que fragmenta la visión social del estudiante.

El maestro de grupo se ha convertido en un experto en el dominio de formas diversas de enseñanza; prescriptor en el dominio de su materia, es decir, un operador de programas de estudio que ahora se denomina como facilitador de la información. Lo importante para él deben ser las reuniones de Consejo Técnico, su participación en la Gestión Escolar; realizar su planeaión, sus evaluaciones; negociar con director y supervisor; actualizarse; mantener el orden en clase y vigilar la disciplina en los recreos. El maestro entonces es un ayudante para aprender, instructor, informador, consejero y animador.

El maestro, por tanto, no es reconocido como un especialista en conocimiento, portador del saber científico, administrativo o tecnológico, devaluando su saber y desligitimizando su condición social y convirtiéndolo en el único responsable de los fracasos señalados en la pruebas estandarizadas. Los saberes que produce no son reconocidos como relevantes dentro y fuera de la escuela. No les es permitido replatear, resignificar y reapropairse de los programas de estudio y hacerlos acordes con los contextos deonde ejerce su práctica educativa.